sábado, 27 de febrero de 2021

EL TEATRO REVIVE A SENDER


     Ciento veinte años después del nacimiento en Chalamera de Ramón J. Sender y sesenta años de la publicación en España de la excelente novela Réquiem por un campesino español -que apareció en México en 1953 con el título Mosén Millán, por miedo a la censura-, la compañía aragonesa Teatro Che y Moche  ha llevado al escenario por primera vez esta obra, una de las más logradas y representativas del escritor oscense.  

    Durante más de una hora, el espectador se acomoda a los recuerdos de mosén Millán, un cura de aldea que está esperando en la sacristía la celebración de una misa de réquiem en el aniversario de la muerte por fusilamiento de Paco, el del molino, uno de sus más cercanos feligreses. Mientras espera impaciente, acompañado del monaguillo, evoca toda la vida de Paco y siente remordimientos por haber facilitado su detención cuando estaba escondido en las Pardinas.

    No es fácil llevar una novela a las tablas. Y hay que reconocer que el grupo zaragozano lo ha logrado con creces. Excelente interpretación del cura de aldea y del protagonista, y una muy lograda ambientación espacial y temporal de esa España dividida de los años 30 del siglo pasado y ahogada por las rencillas, las venganzas y el odio acumulado durante años.  En mi opinión, se me quedó un poco corta y me habría gustado ver sobre el escenario a más personajes reales, representados por distintos actores. De todos modos, vale la pena verla y disfrutar de una hora larga de teatro del bueno.

martes, 23 de febrero de 2021

UNA NOCHE DE INSOMNIO


     Han pasado ya 40 años desde aquel 23 de febrero de 1981 que estuvo a punto de dar un giro radical a la historia de España y echar por tierra cinco escasos años de frágil democracia. Un grupo de militares comandados por el teniente coronel Antonio Tejero, irrumpen violentamente en el Congreso de los Diputados y secuestran a todos los parlamentarios, que estaban votando la investidura de Leopoldo Calvo Sotelo como presidente del gobierno. Fueron 17 horas de pesadilla, con el único alivio del discurso del rey, pasada la media noche, para calmar la inquietud de la mayoría de los ciudadanos. Las negociaciones fueron duras y muy tensas. Y algunos militares, como el teniente general Jaime Milans del Bosch, sacaron los tanques por las calles de Valencia como un desafío brutal a la democracia y a la Constitución de 1978.

    Mi memoria viaja hasta Barcelona, donde yo era un joven estudiante en la facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Central. La inquietud se mezcló con el desconcierto. Y los transistores fueron los protagonistas de una larga noche que nos dejó una sensación de vacío, desamparo y vulnerabilidad. Hoy, 40 años después, es conveniente rememorar ese pasado oscuro para evitar que se repitan los hechos y reforzar esta democracia zarandeada en los últimos meses.  No estaría mal releyéramos alguno de los ensayos publicados posteriormente sobre este golpe de estado fracasado. Yo recomendaría Anatomía de un instante, de Javier Cercas, una verdadera obra maestra, un relato híbrido entre crónica, historia y narrativa, que obtuvo en 2010 el Premio Nacional de Narrativa.      

viernes, 12 de febrero de 2021

CORPUS CHRISTI

    Quedan muy pocas salas de cine abiertas en Zaragoza en estos largos y tediosos meses de confinamiento. La cultura se está abriendo un hueco, a pesar de las restricciones, los miedos inducidos y las extrañas precauciones. Como si acudir a una sala casi vacía supusiera un riesgo para la salud. ¡Paradojas de la vida!


    Y a la escasez de salas abiertas se une la ausencia de grandes estrenos, de producciones de calidad. Menos mal que alguna rompe esa norma y sale de la mediocridad de la cartelera. Es la película polaca Corpus Christi, que pude ver el pasado miércoles en los cines Aragonia. Una gran producción polaca que nos acerca a la cura vida de un reformatorio, con la violencia a flor de piel; a una aldea que sobrevive de milagro cerca de un aserradero y sobre todo, a la gran mentira, al gran fingimiento de uno de los internos que, cuando obtiene la libertad condicional, es destinado al aserradero. Pero, llevado de un extraño fervor místico y con la ayuda de un alzacuellos, logra pasar por sacerdote de la aldea, ganándose la simpatía y admiración de casi todos los habitantes de ese pueblo, azotado unos meses antes por un trágico accidente de automóvil en el que murieron siete personas.

    El director, Jan Komasa, logra que el drama gane enteros minuto a minuto, gracias sobre todo a la excelente interpretación del joven protagonista, por el gran actor Bartosz Bielenia.  Llama la atención esa fotografía desvaída y grisácea, esas caras de angustia y terror, y ese final abierto que deja al espectador lleno de interrogantes e incertidumbre. Una gran película, que triunfó en los festivales de Venecia y Canadá y que estuvo nominada a los Óscar en 2019 como mejor película extranjera. En España se estrenó en junio de 2020 y lleva varios meses en la cartelera. Por algo será.    

lunes, 8 de febrero de 2021

LA ACTUALIDAD DE VALLE-INCLÁN


     El jueves pasado tuve la oportunidad de contemplar la representación de una de las obras más representativas del escritor gallego Ramón del Valle-Inclán, Divinas palabras. Esta tragicomedia de aldea, que vio la luz en 1919, reúne una serie de elementos que van desde la obra medieval La Celestina hasta las vanguardias europeas tan en boga durante el primer tercio del siglo XX. Un sencillo argumento, la pugna entre dos mujeres por la posesión de un enano lisiado que arrastran por ferias y romerías, y un rocambolesco adulterio de una de las protagonistas, mujer del sacristán, quien le perdona con unas divinas palabras, sirve de soporte a una obra que anticipa el esperpento. 

    Valle-Inclán nos sumerge en la Galicia profunda con un lenguaje imaginativo y sensorial. Una sucesión de retablos, protagonizados por seres marginados, son el espejo de las pasiones humanas más elementales como la lujuria y la avaricia. La adaptación teatral de esta obra es muy meritoria y la interpretación de los actores del Centro Dramático Nacional destaca por su hondura y realismo. Ha sido una suerte poder ver de nuevo sobre las tablas una obra del genial esctitor gallego, precursora de su inmortal Luces de bohemia.

  

lunes, 1 de febrero de 2021

UNA PELÍCULA IMPACTANTE

     Son pocos los estrenos de las últimas semanas en las pocas salas de cine abiertas en Zaragoza. Uno de los más recientes es la película ruso-alemana El profesor de persa. En este apasionante film, dirigido por Vadim Perelman e interpretado en su papel de protagonista por el actor argentino Nahuel Pérez Biscayart, nos traslada a la Francia ocupada de 1942 y a la persecución indiscriminada, tortura y posterior aniquilación de los miles de judíos que intentaban huir del terror y de la masacre nazi.

    Uno de estos judíos es el joven protagonista que elude el fusilamiento y, con astucia y humildad, se hace pasar por persa y se inventa una nueva lengua, el farsi, engañando a un oficial de un campo de concentración y ganándose poco a poco su simpatía. El joven judío se caracteriza por su solidaridad ante los más débiles, su asombrosa resiliencia y, sobre todo por su excelente memoria. Gracias a ella será capaz de recordar los nombres de cientos de presos y comunicar su identidad a los mandos de los aliados cuando liberan a los encerrados por los nazis.

    La película nos sumerge en un mundo aparentemente irreal, pero que, por desgracia sucedió durante la Segunda Guerra Mundial. Es bueno recordar y reflexionar para que no se repitan más estas masacres por motivos de raza, cultura o religión. Vale la pena acercarse a la sala de un cine Cervantes semivacío para contemplar sin pestañear durante dos horas una de las historias más trágicas del siglo XX.      



martes, 26 de enero de 2021

A RAS DE HIELO

 


No he podido viajar a Aliaga desde el puente del Pilar debido a las restricciones del COVID. Un confinamiento que se está haciendo largo y que es, en ocasiones, discutible. Pero voy a cambiar de tema porque la saturación informativa sobre el dichoso virus ya está alcanzando límites insospechados.

Selecciono una fotografía de la portada del Diario de Teruel en la que aparece el pantano de Aliaga -o lo poco que queda de él- cubierto totalmente por una espesa capa de hielo. No es la primera vez. Pero es una de las más llamativas. Habría que remontarse al invierno de 2001 para encontrar unas temperaturas que rondaran los 20 grados bajo cero. Y es que Filomena ha llegado con fuerza a toda la provincia.

En la fotografía, un joven de la localidad se muestra tranquilo y seguro sobre ese nuevo suelo blanco y congelado. Y al fondo, un telón conocido pero poco atrayente: el esqueleto de la central, que está esperando una reforma que se prolonga desde su clausura definitiva en 1982. Es una pena que todo siga igual. Que predomine el silencio, la soledad y el abandono. Y lo peor de todo es que, al menos a corto plazo, no se vea un futuro en esta zona abandonada de las Cuencas Mineras.

Este año será más largo el invierno, más larga la ausencia, más alargada la sombra de los recuerdos. Pero habrá que tener esperanza. Para la primavera o el verano habrá que regresar a las raíces. Y si puede ser vacunados e inmunizados mejor que mejor.  

sábado, 23 de enero de 2021

RADIOGRAFÍA DE UN SIGLO CONVULSO


 Tengo entre mis manos el ensayo Una violencia indómita, último libro de Julián Casanova, catedrático de Historia Contemporánea de la Universidad de Zaragoza. Este historiador propone un nuevo enfoque de las manifestaciones violentas que desde el terrorismo anarquista a las guerras de secesión en Yugoslavia marcaron la historia del siglo XX europeo.

Cuando hablamos del siglo XX, todos recordamos unos años convulsos, con dos guerras mundiales, la guerra civil española y el conflicto de los Balcanes. Pero casi nadie presta atención a ese germen de los nacionalismos que se estaba gestando ya desde finales del siglo XIX. También nos olvidamos de los odios y cicatrices ocultas de las posguerras y de las continuas represiones y violaciones de los derechos humanos a lo largo y ancho del viejo continente.

Julián Casanova nos abre los ojos a una nueva realidad y despierta la reflexión del lector a medida que avanza en su lectura. Es un ensayo para todo tipo de lectores interesados en la Historia. Una obra muy bien documentada y con una cronología que nos ayuda a situarnos en un momento determinado. Las primeras líneas de la Introducción son elocuentes y muy significativas. Los inicios del siglo XX fueron aparentemente tranquilos y placenteros. Pero el trasfondo estaba oculto como un iceberg bajo un océano de tranquilidad: "Mañana seremos testigos no solo del comienzo de un nuevo año, sino de un nuevo siglo", anunciaba The Sunday Times el 31 de diciembre de 1899. Esa noche de domingo se celebró en toda Europa el final del siglo XIX y el comienzo del XX, con fuegos artificiales , toques de campanas y bandas de música... La burguesía y las clases medias saludaron el nuevo siglo con entusiasmo y orgullosas de los avances de la industrialización y de sus posesiones coloniales.        

jueves, 21 de enero de 2021

RESTAURAR LA DEMOCRACIA

     El 20 de enero de 2021 puede pasar a los anales de la Historia tanto por su significado como por su trascendencia. En un momento tan complicado para Estados Unidos, pocos días después del multidudinario asalto al Capitolio, Joe Biden acaba de jurar su cargo como el 46 presidente electo de una de las naciones más poderosas del mundo. En una ceremonia singular, con ausencia de público debido al covid y con extraordinarias medidas de seguridad para evitar nuevos altercados, el nuevo presidente ha condensado en un  esperanzador discurso sus intenciones de futuro y ha apuntado una nueva manera de gobernar, muy distinta y casi antitética, a la de su antecesor en el cargo. 

    El reto más difícil de Biden es restaurar la democracia. Una democracia herida de muerte en una sociedad dividida y polarizada tras cuatro años de desgobierno populista y de soflamas vacías de contenido. La herencia de Donald Trump, que se ha retirado por la puerta de atrás y no quiso asistir a la investidura de su sucesor, va a ser desde el primer día una sombra demasiado alargada para un país que siempre ha intentado ser el espejo democrático donde se han contemplado la mayoría de las naciones de Occidente. Porque está claro que el nuevo presidente norteamericano tiene mucho mérito. Su vida anterior ha estado marcada por tragedias familiares y dolorosas ausencias. Y, casi milagrosamente, se ha sabido sobreponer a los duros reveses de la vida. Por eso, es un mérito encomiable que a sus 78 años se decida a tomar el timón de esta nación convulsa y multirracial y no le tiemble el pulso.


    El tiempo nos dirá si sus propuestas han sido acertadas y si su equipo, comandado por la vicepresidenta Kamala Harris, va a ser capaz de enderezar esa nave que, cual un nuevo Titanic, tiene que salir a flote, a pesar de los vaivenes cotidianos. El mundo espera este cambio de rumbo y todos deseamos que predomine la tolerancia, la empatía y una manera de gobernar alejada de los populismos y de los nacionalismos excluyentes y narcisistas.

lunes, 18 de enero de 2021

EL DESASTRE DE ANNUAL


     De vez en cuando, es bueno volver la vista atrás, mirar por el espejo retrovisor y evocar momentos decisivos de la historia de España, de nuestra historia. En este caso, quiero recordar la lamentable derrota de las tropas españolas en la guerra del Rif, durante veinte días del verano de 1921. Se cumple el centenario de tan lamentable fracaso político y militar y es bueno releer a autores que han llevado a la literatura sus propias vivencias y amargas experiencias. Quiero destacar, sobre todo, estas tres novelas: Imán, de nuestro aragonés Ramón J. Sender; El blocao, de José Díaz Fernández, y La ruta, de Arturo Barea.  

    Precisamente durante estos días estoy enfrascado en la lectura del segundo volumen de la excelente trilogía La forja de un rebelde y mis sensaciones son casi idénticas a las que experimenté la primera vez que leí Imán. El escritor extremeño pone el dedo en la llaga y reflexiona sobre la corrupción en el ejército, la miseria de los habitantes de las cabilas del norte de Marruecos, la insolidaridad, las injusticias, el afán de medrar a costa de lo que sea y la incertidumbre ante un negro futuro. Aunque Barea logró regresar a Madrid debido a una enfermedad pulmonar, muchos se quedaron en el camino. Fue una sangría total en el ejército español aplastado por las tropas de Abd el-Krim. Y lo peor de todo es que no se tomaron las medidas necesarias para detener a tiempo una guerra inútil a la que habían ido obligados por reclutamiento los jóvenes de las familias más humildes.

    Después de cien años, es bueno recordar uno de los sucesos más trágicos del siglo XX después de la guerra civil. La derrota de Annual provocaría el golpe de estado de Miguel Primo de Rivera en septiembre de 1923 y siete años de  incierta dictadura. De nada sirvió el expediente Picasso. Todo se pasó por alto sin juzgar a los responsables de semejante despropósito. Barea reflexiona y valora todo esto desde su propia experiencia. Vale la pena leer la novela y visionar la serie de televisión española de los años noventa.  

sábado, 16 de enero de 2021

125 AÑOS DE HISTORIA


 Ayer tuve la oportunidad de visitar en el zaragozano palacio de Sástago una exposición  con las mejores fotografías publicadas en Heraldo de Aragón en sus 125 años de historia. Una historia plasmada día  tras día y llena de paradojas   y de contrastes. Aunque son relevantes los eventos  positivos, como los logros de la autonomía o el histórico  gol de Nayim en la final de la Recopa de 1995, llaman más  la atención los sucesos trágicos como los incendios del hotel Corona de Aragón y de la discoteca Flying o el atentado  contra el cuartel de la Guardia Civil en la avenida de Cataluña. 

Son recuerdos, evocaciones, vivencias e intrahistoria que quedarán para siempre en los archivos  de las hemerotecas. Algunos los he vivido personalmente, pero la mayoría permanecen ocultos en el baúl de los recuerdos. Ahora, con el auge de la prensa digital,  el periódico en papel parece que pierde protagonismo. Sería una pena que desapareciera. De todos modos, esas impactantes fotografías quedarán grabadas en nuestra retina como hitos de progreso o de vuelta atrás en el inquietante camino de la historia de Aragón.

jueves, 14 de enero de 2021

EL DIFÍCIL RETO DE ENVEJECER


En estos tiempos tan convulsos y en plena tercera ola del coronavirus, la preocupación de las autoridades sanitarias se centra en los geriátricos o residencias de ancianos. Son los más vulnerables y los que sufren más el fantasma de la soledad y ese amargo aislamiento del mundo que les ha rodeado hasta entonces.
La excelente película EL PADRE, protagonizada por el gran actor Anthony Hopkins pone el dedo en la llaga e invita al espectador a reflexionar sobre el avance imparable de los años y la dificultad de llevar a una determinada edad una vida cotidiana normal en la que uno es autosuficiente. Porque está claro que el deterioro físico, y sobre todo psicológico, son un lastre a veces insalvable para los más allegados. Enfermedades crónicas como el Alzheimer afectan gravemente no solo a la mente sino a la movilidad física y al control de los actos más cotidianos. Por eso, como se puede ver en la película de Florian Zeller, a veces la situación es tan insostenible, que la hija no tiene más remedio que ingresar a su padre en un geriátrico, con un desgarro en el corazón tanto para ella como para el anciano padre.

Porque está claro que vivimos en una sociedad consumista y capitalista en la que las personas mayores no tienen espacio en nuestras vidas. Un factor importante es la longevidad en los países más desarrollados. En España hay más de quince mil personas que sobrepasan los cien años. Y la mayoría están en residencias. Solo unos pocos permanecen en sus domicilios al cuidado de una persona interna. Esa es la cruda realidad. Una situación que va a ir a más y que es muy difícil de resolver. Son muchos los interrogantes que nos plantea esta película. Pero resulta casi inevitable afrontar una vejez sin convivir con el fantasma de la soledad. Una soledad que a veces deriva en depresión o en deseo de abandonar una vida sin alicientes.    

sábado, 9 de enero de 2021

EL HECHIZO DE LA NIEVE

 Mientras contemplo desde mi ventana cómo  la nieve cae mansamente sobre una ciudad silenciada, casi desierta, recuerdo las nevadas de los años de mi infancia en Aliaga, más  intensas y más frecuentes. Lo que era una alegría para mi ingenua  mirada infantil era un engorro para los adultos. En los años sesenta del pasado siglo no había tantos medios para resolver los problemas de movilidad y las carreteras eran infames. Los pueblos quedaban aislados durante semanas y la vida era mucho más  precaria. Aún así éramos muy felices.

Ahora, medio siglo después, nos sorprende Filomena con una nevada inusual en Zaragoza y en muchas zonas de España. Una nevada que me recuerda a la del 22 de febrero de 2005, hace casi 16 años. Tengo grabada en la memoria esa fecha porque tenía que defender en la facultad de Filosofía y Letras mi tesis doctoral. Solo funcionaba el transporte público y algunos miembros del tribunal tuvieron problemas  para llegar desde Madrid. Afortunadamente no se aplazó el acto. Y luego lo celebramos con una comida en la Rinconada de Lorenzo.  Parece que fue ayer.

Hoy la nieve continúa cayendo mansamente. Menos mal que estamos en un fin de semana y la mayoría no tiene que ir a trabajar. De todos modos, el caos está servido. Los más optimistas piensan que así los ciudadanos saldrán  menos de sus casas y así no se propagará tanto el maldito 


virus. A ver si es verdad. Ahora  me doy cuenta  de que tengo las botas de invierno  en Aliaga. Ya me había olvidado de estos temporales  a la orilla del Ebro. Y con el confinamiento provincial será  difícil  viajar durante  unos meses. Que llegue pronto la vacuna. Y que sea eficaz.

jueves, 7 de enero de 2021

ESPERPENTO EN EL CAPITOLIO


Anoche me quedé  viendo las noticias de última  hora hasta las tantas y casi me desvelé. Durante los primeros minutos me frotaba los ojos con incredulidad mientras contemplaba  las sorprendentes  imágenes que llegaban desde la sede del congreso y del senado de los Estados Unidos en Washington.  La turba de descerebrados que invadían la sede parlamentaria me recordó el 23 de febrero de 1981 cuando otro descerebrado como Trump encabezó una asonada en el congreso de los diputados porque, al igual que los furibundos trumpistas, no estaba de acuerdo con un gobierno elegido democráticamente en las urnas.

¿Qué pintaría nuestro  inmortal Francisco de Goya si hubiera presenciado tan decimonónico espectáculo? ¿Qué obra tragicómica escribiría Valle-Inclan, cual un nuevo esperpento del siglo XXI?¿Crearía Sender un nuevo relato como el ya famoso Chandrío en la plaza de las Cortes? 

Lo cierto es que lo que ocurrió ayer tarde en el corazón de la capital americana pasará a la historia de la democracia más antigua  del  mundo como una mancha imborrable en los anales de la Historia. Es de esperar que estos actos incívicos propios de una república bananera no se extiendan como manchas de aceite a otros países. Y eso sí, que Donald Trump regrese a la caverna de donde nunca debió salir.







miércoles, 6 de enero de 2021

TARDE DE REYES

 La tarde de Reyes tiene un sabor agridulce, como de despedida de unos días de relajación y de  vida en familia. Y este año se añade el ingrediente del coronavirus, que nos ha partido a todos por medio. Debajo de esa engorrosa mascarilla, adivinamos semblantes tristes, preocupados, cariacontecidos. Ni los más  pesimistas pensaban hace poco más de nueve meses que íbamos a seguir así, esperando  un milagro que no acaba de llegar. Los malo es que al final siempre lo pagan los más vulnerables tanto en salud como económicamente. Es verdad que  es difícil buscar el equilibrio. Pero que quede claro que ni la cultura ni la hostelería ni el deporte tienen toda la  culpa del  incremento de contagios. La mayoría proceden de ciudadanos  irresponsables  durante las  celebraciones  navideñas con familiares y amigos. Seria un error tener que volver a un segundo confinamiento. La salud mental también es importante,  señores políticos.

En esta tarde de y para los niños habrá que pedir a los Magos de Oriente más  salud, más sentido común, más tolerancia y que la vacuna sea más rápida y más eficaz.  Poco a poco va ganando el día a la noche. Pero todavía nos sorprende la larga sombra crepuscular.  Y dicen que vienen copiosas nevadas. A ver si es verdad y se cumple el refrán. Poco tiene que mejorar 2021 para superar con creces al nefasto y casi olvidado 2020. Y mañana vuelta a la bendita rutina. Lástima que


no podamos ir a Aliaga.  Ya son  casi tres meses de confinamiento provincial. ¿Habrá servido para algo?

martes, 5 de enero de 2021


 Después  de más  de trece años vuelvo a teclear en esta página en blanco para plasmar mis vivencias e inquietudes cotidianas. Han pasado  tantas cosas que en esta larga y complicada década que pesan más  los acontecimientos  negativos  que los positivos. Son tantas  las  ausencias y tanta la nostalgia que a veces es difícil expresarlo  con palabras.

De todos modos, como  prefiero ver la botella medio llena, quiero recordar las titulaciones de Grado en Historia y tú el Máster de Secundaria  de Javier, mi inicio de la etapa de jubilación, las nuevas y enriquecedoras amistades y el mantenimiento de mi actividad deportiva.

Lo peor se todo ha sido, sin embargo, esta maldita pandemia que lleva casi un año entre nosotros. Es de esperar que  este 2021 suponga la salida del túnel gracias a las vacunas que deseamos sean eficaces.